José Luis Cabezas: 20 años de su asesinato

El fotógrafo de la revista «Noticias», José Luis Cabezas, asesinado el 25 de enero de 1997, es el primer trabajador de prensa que murió como consecuencia de su trabajo desde la recuperación democrática, en un hecho perpetrado por personas vinculadas al empresario postal Alfredo Yabrán.

«Lo importante es mantener vivo el recuerdo de José Luis. Él fue una víctima de un poder que se sintió impune y quiso acallarlo, pero era una persona que vivía, reía y quería. Eso también debemos evocarlo», señaló el periodista Gabriel Michi, compañero de Cabezas en una cobertura veraniega para la revista «Noticias» en la Costa Atlántica.

«Hacíamos notas de todo tipo, modelos, hechos policiales, fiestas, pero cubríamos también las actividades que llevaban a cabo los políticos que pasaban sus vacaciones en Pinamar», apunta el periodista, que acaba de publicar un libro sobre el tema, dos décadas después del asesinato.

Lo que esos periodistas supieron, lo sabían, antes y mucho mejor, los gobernantes, los políticos, los organismos de control y muchos “periodistas”, sólo que lo dejaron hacer.

Ya no queda ningún preso

Con la liberación, el último 21 de diciembre, del ex policía Gustavo Prellezo, autor material del crimen del reportero gráfico José Luis Cabezas, ya no queda preso ninguno de los condenados por esta causa.

«La liberación de Prellezo por buena conducta es un cachetazo, por más que se hayan cumplido los plazos procesales establecidos. La Justicia lo premia por buena conducta. El se recibió de abogado en la cárcel, pero nunca le pidió perdón a la familia de José Luis y eso debería ser parte de la resocialización», remarca el periodista Gabriel Michi.

Prellezo fue condenado a prisión perpetua por el asesinato, pero en 2010 fue beneficiado con una prisión domiciliaria, de la que ahora fue liberado, aunque Michi considera que no se cumplió de manera adecuada.

«Al principio le colocaron una tobillera magnética, pero como no funcionaba bien quedó en condiciones de hace lo que quería. Salía, se paseaba por dónde tenía ganas», sostiene el periodista.

En cuanto al jefe de Seguridad de Yabrán, Gregorio Ríos, fue condenado como instigador del crimen de cabezas y hace dos años la Justicia dio por terminada su condena, en la actualidad reparte su tiempo entre la zona norte del Gran Buenos Aires, donde habita, y Corrientes, provincia en la cual administra unos campos.

 

En tanto que el policía Sergio Camaratta condenado a prisión perpetua, murió el 3 de abril de 2015 y el efectivo de la bonaerense Aníbal Luna condenado a prisión perpetua se encuentra beneficiado «por un régimen especial» y se encuentra en libertad en la localidad bonaerense de General Madariaga.

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